El nombre de Jimmy Choo se ha convertido en epítome del glamur, logrando erigirse en poco tiempo en un estandarte del calzado de lujo.
HISTORIA
Nacido en Malasia en una familia humilde de zapateros, Jimmy Choo se ha convertido en el creador de zapatos predilecto de los royals y las celebridades. El diseñador comenzó su imperio desde abajo en un taller en Londres hasta 1996 que cofundo Jimmy Choo Ltd. Lo que impulsó el éxito de Jimmy Choo, como la mayoría de las marcas británicas de la época, fue su conexión con la Princesa Diana.
La firma se caracteriza por un marcado carácter sexy, una calidad Made in Italy y por ser una de las favoritas de las estrellas sobre las alfombras rojas. El enfoque de Jimmy Choo, desde sus humildes comienzos, siempre ha sido crear calzado de lujo con la más alta artesanía.
“El zapato correcto puede hacer toda la diferencia.”
Los diseños de Jimmy Choo cobran vida en Italia, elaborados con materiales cuidadosamente seleccionados y acabados a mano por artesanos locales. Las pieles son seleccionadas a mano de razas holandesas de la más alta calidad y curtida por una curtiduría altamente calificada certificada ISO para la sostenibilidad. Cada pieza es una encarnación de la herencia británica de excelencia y artesanía.
En 2001, Choo vendió su mitad de la empresa y poco tiempo después su sobrina, Sandra Choi, se unió como directora creativa, convirtiéndose en la responsable creativa de una de las marcas más deseadas y con mayor y más rápida proyección de la historia reciente de la moda.
Hoy, Choo ha vuelto a sus raíces en una pequeña tienda que abrió en Londres, que sirve como sede de la exclusiva línea Jimmy Choo Couture. Es aquí donde Choo fabrica una pequeña cantidad de pares de zapatos cada semana y capacita a un grupo selecto de estudiantes sobre cómo hacer calzado de alta gama.
“Es un arte hermoso y distintivo, y los zapatos son como los cimientos. Si los cimientos no están bien, el edificio no se mantendrá erguido, y si el equilibrio de una mujer no está bien, nada más lo estará.”